A sus 11 años, Thiago ya es todo un ejemplo de generosidad y buen corazón que ha conmovido a todo el mundo con el gran amor que profesa a los animales.
Y es que este pequeño brasileño se dedica a bañar con mimo y esmero a los perritos abandonados que se encuentra abandonados para ayudarlos a encontrar un hogar más fácil y rápidamente.
Su fantástica iniciativa, que se llama «Estoy en la calle, pero estoy limpio».
Comenzó en 2020 y desde entonces Thiago se ha encargado de cambiarle la vida a 47 canes que ya han sido adoptados.
Para lavarlos y dejarlos aseados, perfumados y muy guapos, el niño cuenta con la ayuda de los comercios locales, que le regalan los productos de higiene necesarios para su labor.
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